sábado, 15 de enero de 2011

Odio el nombre de mi blog

Pensar que Lady Gaga... Hace muchísimo mas dinero que otros artistas que yo personalmente amo... Eso... Eso tiene demasiado sentido.

Ayer en la charla de Eli se discutió por unos breves momentos el porque de esto. Mucha gente se lo ha preguntado supongo. "ALA... Por que Justin Bieber es tan famoso y Dave Matthews no?" "Man... Radiohead es VERDADERA música, por que no la pasan en el radio en lugar de David Guetta?" Y cosas asi, mas o menos. La razón, a mi entender, es bastante sencilla. La razón, en realidad, se la copie a la charla de ayer pero me gustaría abundar en esto.

"El rollo es que en estos tiempos todos los medios de comunicación, la moda, los libros, la música, los programas de televisión, las películas, blah blah; todos ellos están diseñados para brincarse tu intelecto."

Así es. Estas palabras me asustaron mucho. Resulta que todo aquello de lo que me alimento culturalmente; toda la información que me rodea, todos los días; todo lo que veo, oigo, toco, aprendo, lo que como y respiro; todo eso viene siendo para mis procesos mentales lo que seria programar 5 + 3 en java. La cultura de hoy, mi cultura me presenta un reto intelectual equivalente a recitar la tabla del 2; la del 3 en el mejor de los casos. Todo esto que recibo y proceso me nutre tanto como una bolsa de Cheetos Puffs (R) y tal vez una coca.

Todo esto me preocupa porque últimamente mi maquinita cabecil muestra un alarmante grado de lagunas, bugs y fallas en el sistema, muy cotidianamente... En fin, temo que toda la porquería que está encontrando su camino hasta mi cerebro haya terminado por iniciar un desafortunado e indeseable proceso de putrefacción. Mera mera mera, a lo mejor estoy exagerando con lo del proceso de putrefacción. Pero algo es muy cierto, de todas las cosas que podrían nutrirme, enseñarme, disciplinarme, hacerme reflexionar, aprender, pensar y cambiar para bien, estoy tomando muy pocas y es un desperdicio.

No es que esté mal leer TVyNovelas (tm) o ver VH1 seis horas al día, o ver películas de Jack Black o escuchar Kanye West. Pero hacerlo todos los días a todas horas, eso si ya empieza a fregarme la maquinaria, a enmohecerme los engranes, a oxidar tornillos y sobre todo a causar que pierda el respeto y el gusto por las cosas buenas y que si valen la pena.

Por ejemplo, hace rato me pase por el blog de RARS y al no encontrar una sola referencia pop en ninguno de los artículos estuve a punto de súper largarme. En chaz. Fue entonces que me acorde de la charla del viernes y pensé: "Hmm... Leamos un poco mas." Y encontré una entrada sobre los autores de ciencia ficción y la subestimada aportación creativa que le hacen al pensadero del mundo. En general, sciencefiction.org no está en mis favoritos pero encontré el articulo sorpresivamente interesante y profundo. A veces tan profundo que mis ojos pasaban por encima de una frase larga sin comprenderla, mi flojo cerebro rechazándola. Pero lograba recuperar el hilo y terminé reflexionando, pensando. Hice algo que casi nunca hago y aprendí algo. Me gustó.

Ahora pienso que de eso se deberían tratar el arte, la literatura buena, la musica, blah blah. Se trata de que sea interesante, que le haga cosquillas a la inteligencia de la persona, que despierte su curiosidad y saque a ese hamster corredor de su letargo y lo ponga a trabajar y dar vueltas para que la persona saque conclusiones propias y se sienta motivado a responder, a aportar algo también. COF COF. Se trata de que nos inspire.

"Por que estaría cool por una vez escuchar la 5ta sinfonía y no Alejandro"

Ay ay. Por que, por que? No me malinterpretes; admiro en cierta forma a Lady Gaga y creo que requiere talento hacer el desmadre que ella hace. Pero hay una de esas dos obras que requirió tres años de trabajo, una actividad neuronal suprema por la complejidad del trabajo, un proceso creativo sofisticado, mucha disciplina, genio y voluntad de hierro para vencer la sordera. Adivina cual de las dos no es.

Tal vez no se pueda perrear la 5ta sinfonía, tal vez no se pueda cantar o poner en el carro como música ligera (eeeh! eh eh eh) pero es muy bella. Mas que eso, es POTENTE, INTENSA, EMOCIONANTE. Like every other Vin Diesel movie except BETTER!

Todo esto se oye súper menso pero mi punto es: Si vale la pena escuchar, ver y leer cosas diferentes, aun si solo es porque son diferentes y para poder presumir de un mayor acervo cultural.

BY by by, no me mires así. La neta no me estoy sugiriendo a mi misma ni a nadie que reseteen su itunes y que se bajen toda la música clásica, extranjera y de viejitos que se encuentren. No. Que hipócrita seria. Lo que si sugiero es que le demos una segunda oportunidad a materiales de formato que parece aburrido, con lenguaje que no nos es familiar o que traten temas que por lo general no nos interesan. Me imagino que al menos 1 de 100 veces vamos a encontrar algo que valga la pena. Y eso es 1/100 mas veces que si solo surfearamos en los trabajos que nos son familiares y cómodos. Y seremos 1/100 mas ricos, y nuestra capacidad se estará aprovechando un 1% mas y WOOOOO!!! Seria muy bueno en realidad.

Eso me enseñó la charla de Eli, de cuyo punto he divergido perpendicularmente (*) en esta entrada, pero es bueno que haya aprendido algo.

(*) No se lo que esto significa.
Gracias.

1 comentario:

  1. Ah mujer, buena entrada ;) y en parte tienes mucha razón, el hecho de buscar algo que nutra esa cosa que cargamos sobre los hombros la mayoría de nuestro tiempo, no está nada mal.

    Claro, tendría que decir también que existen momentos en los que la mente quiere no pensar, quiere tirarse por ahí y echar la weba sobre ella. Y no creo en lo más mínimo que esto sea malo. Si comiéramos todo el tiempo, por más sana que fuera la comida, llegaría el momento en que vomitaríamos o moriríamos.

    Es lo que quería comentar ;) saludos Katy, pásala bien y me gustó la casi total falta de emosidad de esta entrada.

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